La situación diplomática entre Haití y República Dominicana vuelve a tonarse incierta debido a incidentes en la zona fronteriza de Dajabón en las que haitianos, que el Gobierno dominicano aún no sabe si pertenecen a la polícia haitiana, violentaran terrirorio quisqueyano, dañando de forma considerable una de las pirámides puestas por el Gobierno para delimitar territorio.
Esa situación ocurrió el pasado martes por lo que el ministro de relaciones exteriores, Roberto Álvarez, llamó de manera enérgica a las autoridades haitianas a poner orden en su país y rechazar esas acciones «belicosas».
Tras un documento emitido por autoridades haitiana en el que se culpa a la República Dominicana de violentar territorio haitiano e iniciar el conflicto del martes, el ministro solicitó al Gobierno haitiano “una ratificación pública informando de que no cuestiona en ninguna medida la actual delimitación fronteriza”, que, precisó, es inamovible e inapelable.
El conflicto entre República Dominicana y Haití inició por el canal que construye el vecino país en el río masacre violentando varios tratado entre las dos naciones de la isla y escaló a una crisis comercial, que, al parecer, ha avivado los conflictos territoriales que históricamente enfrenta a los dos países.