Un momento de euforia y tensión se vivió tras finalizar el concierto de Luis Miguel en el Estadio Olímpico Félix Sánchez en Santo Domingo, República Dominicana, y es que más de 500 personas se trasladaron hacia el pequeño helipuerto que se encuentra a pocos kilómetros de la arena para despedir al artista mexicano.
El personal de seguridad y agentes de la Policía Nacional parecían no dar abasto, pero ‘Luismi’ lucía confiado de que sus fanáticos no le harían daño. El cantante de «La Incondicional» se mostró sonriente y le dio la mano a quienes alcanzaba, antes de abordar el helicóptero.
«Mi ídolo, qué emoción tocarle sus manos, feliz de verlo, agradecida de tu concierto. ¡Te amo, Luis Miguel!», dijo una admiradora de la estrella latina.
Aunque la situación aparentaba salirse de control, finalmente no hubo ninguna situación lamentable y Luis Miguel pudo irse tras haber complacido con su cercanía y afecto a todos los presentes.
«El Sol de México» ofreció un espectáculo este jueves en la capital dominicana, donde cantó unas 32 canciones seguidas, sin hablar a su entrada ni en su despedida.
El concierto estaba programado para el pasado miércoles, sin embargo, la producción decidió posponerlo para el día siguiente por supuestos “inconvenientes técnicos”.